martes, 20 de octubre de 2015

La guerra





tiene labios azulados,
ojos de soledad, carne de frío,
campos de noche eterna, gesto airado,
inviernos sin otoño y sin estío,


la guerra...
tiene niños asombrados,
manitas de miseria y extravío,
cierzos que cortan vidas y sembrados,
grises atardeceres, sol sombrío,

la guerra...
tiene dientes afilados,
cuchillos de acerado desafío,
boquitas de hambre triste y rostro helado,
inmensa podredumbre hacia el vacío,

la guerra...
tiene el ceño ensangrentado,
harapos y negrura de atavío,
alaridos sin nombre y sin soldado,
desbordadas las venas, turbios ríos.

La guerra...,
sal en la herida abierta de la tierra.









Los muertos son los únicos que ven el final de la guerra.









16 comentarios:

carlos perrotti dijo...

Impecable poema. No la conocía a Antonia. Ya mismo me pongo a subsanar eso.

Buen momento, además, para escuchar el Requiem...

Juan Nadie dijo...

Magnífica entrada: la fotografía, el poema de Antonia Álvarez, a quien no conocía hasta ahora (gracias), y el Requiem de Mozart no podía ser más apropiado.
Felicidades por la entrada.

marian dijo...

Merece la pena que lo "subsanes", Carlos, ya lo verás. El Requiem de Mozart es, para mí, de lo mejorcito de toda la historia de la música.

marian dijo...

Gracias, Charlie, sé que es demasiado evidente reunir las tres, la fotografía, esa poesía y la música, pero esa imagen del bombardeo de Dresde es impactante; realmente no necesitaría un poema ni música que la acompañase, pero son apropiados, es verdad.

carlos perrotti dijo...

La estuve leyendo en la madrugada. Es muy muy pero muy buena poeta. España siempre pela poetas. Es un árbol de poetas España, de cuatro estaciones, de sus ramas siempre te bajas uno...

Tengo el Requiem por la Sinfónica de Viena. Aquí está sonando en esta desapacible mañana de Buenos Aires.

carlos perrotti dijo...

Sí, perdón, la fotografía es alucinante.

Juan Nadie dijo...

"tiene labios azulados,
ojos de soledad, carne de frío"

No se puede definir mejor la patología de la guerra.

marian dijo...

Es impresionante, Carlos. La fotografía impacta por su realismo y por el contraste con la imagen de la estatua (de la torre del ayuntamiento de Desdre que quedó en pie), que aparece contemplando la desolación con esa expresión de placidez.

marian dijo...

Creo también que es una definición exacta, Charlie.

marian dijo...

La fotografía es de Richard Peter, he colocado también la foto tal cual es, sin retocar.

marian dijo...

La expresión de la cara en la fotografía sin retocar es de compasión, me parece.

carlos perrotti dijo...

Un tipo valioso, evidentemente.

http://www.fotonostra.com/biografias/petersen.htm

marian dijo...

Sin duda.
Me cae bien, por autodidacta, por antinazi y por el motivo por cual fue expulsado de un partido. Todo esto al margen de su fotografía, de la que me interesaré más a fondo.

carlos perrotti dijo...

Lo mismo digo.

carlos perrotti dijo...

Bellísimo, Marian. Inspiradísima composición y fotografía. Redondita como la luna, como la noche y el día.

Gracias!

marian dijo...

¡De nada! Lo inspiró el poema.