jueves, 27 de febrero de 2014

Nos queda su música, su arte y su duende













Hace tan solo un mes que murió Félix Grande.
 En ese adiós quise acompañarlo con un poema de su compañera, Francisca Aguirre,
y con dos poetas del flamenco:

Paco de Lucía y Camarón de la Isla

Hoy es Félix Grande con uno de sus poemas

UNA GOTERA


Escucho la guitarra de Paco de Lucía.
 La música me araña los huesos de la edad.
 Lejanamente todo mi pasado se enfría.
 Una gotera insiste entre la soledad.

 La madrugada apoya su frente en la ventana
 y me confía unas sílabas de pena y compasión:
 se lo agradezco desde la yel de esta desgana.
 Hay una losa de algo sobre mi corazón.

 Una gotera. Una gotera hay en mi casa
 en esta rara noche de música y de adiós.
 Y en esta seguiriya que me hiela y me abrasa
 veo el rostro de la nada como un golpe de tos.

 ¿Qué es esto? ¿No está al lado mi bella hija dormida?
 ¿No está ahí cerca dormida la paz de mi mujer?
 El invierno tirita y me lame la vida.
 Mi juventud se ha ido para nunca volver.

 ¿Te acuerdas, Paco? Un día fuimos adolescentes
 entre hermosas guitarras y muchachas de miel.
 Y hoy la noche de invierno me acaricia los dientes
 Y hoy la noche de invierno me acaricia los dientes
 y el viento de los años dormita en el mantel.

 Todos mis sueños muertos se acuestan a mi lado
 y esta gotera sigue rezando sin cesar.
 Hasta el renunciamiento me dejó abandonado.
 Se han ido lejos hasta mis ganas de llorar.

 Cuando ya ni la lágrima acude hasta la herida
 y la vida es convulsa como golpe de tos
 ¿qué le queda a esta llaga trivial y entumecida?
 ¿qué le queda a esta música? ¿qué nos queda a los dos?

 Suena en la seguiriya la lujuriosa pena
 de un tiempo que se apoya cansado en la pared.
 Y suena en mi memoria y en mi cansancio suena
 la horrenda saciedad que me dejó la sed.

 Perdona, Paco. Excusa esta porción de invierno
 con que te está escuchando mi viejo corazón.
 Y que Dios te bendiga por ese ruido eterno
 que suena como suena la palabra perdón.

 Fumo mi cigarrillo sentado en una silla,
 cercado por la silla, la tiniebla y la edad.
 Oigo el perdón, muy próximo, en esta seguiriya.
 Y oigo, lejos, la espalda de la felicidad.

Félix Grande








Todo lo que hago es flamenco.
Sobre todo cuando no hago flamenco.


Con Pedro Iturralde



Con Bryan Adams




Con John McLaughlin y Larry Coryell




Con Joaquín Rodrígo (Fragmento del Concierto de Aranjuez)






No somos tu familia ni amigos, ellos son los que notarán tu ausencia, pero...

algo se muere en el alma
cuando un poeta se va






miércoles, 26 de febrero de 2014

Tango a Évora



Nosotros cantamos sobre nuestra tierra, 
sobre el sol, 
sobre la lluvia que nunca llega, 
sobre la pobreza y problemas, 
y sobre cómo vive la gente en Cabo Verde




Se definió como una cantante de morna (blues caboverdiano), género originario de Cabo Verde que guarda muchas similitudes con el fado portugués y el tango, así como también la coladera, un ritmo de características similares al anterior,  aunque más acelerado.






La morna es triste porque en mi país hay mucha miseria,
 y yo vengo a cantarle a la pobreza del pueblo.













Tango a Évora (Loreena McKennitt)





jueves, 20 de febrero de 2014

Se dejaba llevar





La sensación de emocionarte con algo 
y de sentir que se ponen los pelos de punta, 
creo que es indescriptible, 
y creo que es un tesoro que tenemos.
 Y que no hay que olvidar jamás. 

A.V.





SE DEJABA LLEVAR


Azul, líneas en el mar, qué profundo 
y sin domar acaricia una verdad. 

Eh, tú, no lo pienses más, 
o te largas de una vez o no vuelves nunca hacia atrás. 

Se dejaba llevar, se dejaba llevar por ti, 
no esperaba jamás y no espera si no es por ti. 
Nunca la oyes hablar, solo habla contigo y nadie más, 
nada puede sufrir, que él no sepa solucionar. 

Temor, alcohol de quemar, 
pon tus manos a volar o en tus ojos el terror. 

Azul, vuelve a reflejar y fundido con el sol 
reina un sueño de sonido a mar.

Se dejaba llevar, se dejaba llevar por ti, 
no esperaba jamás y no espera si no es por ti. 
Nunca la oyes hablar, solo habla contigo y nadie más, 
nada puede sufrir, que él no sepa solucionar. 


ANTONIO VEGA








Homenaje a la copla TATUAJE (1999) 

 AY PENA PENITA PENA



Si en el firmamento
poder yo tuviera
esta noche negra
lo mismo que un pozo
con un cuchillito
de luna lunera
cortaría los hierros
de tu calabozo.

Si yo fuera el dueño
de la luz del día
del viento y del mar
cadenas de esclavo
yo me colgaría
por tu libertad.

Ay pena penita pena (pena)
pena de mi corazón
que me corre por las venas
con la fuerza de un ciclón.

Es lo mismo que un nublao
de tiniebla y pedernal.
Es un potro desbocao
que no sabe adonde va.
Es un desierto de arena (pena)
Es mi gloria en un penal.
Ay pena penita pena.

Yo no quiero flores, dinero ni palmas.
Quiero que me dejen llorar tus pesares
y estar a tu vera
cariño del alma
bebiéndome el llanto
de tus soleares.

Me duelen los ojos de mirar sin verte.
Reniego de mí
Yo tengo la culpa de tu mala suerte
mi rosa de abril.

Ay pena penita pena (pena) ...

(Quintero, León y Quiroga )




sábado, 15 de febrero de 2014

Una voz única








Con mi voz puedo sonar como una niña, 
como el coco, 
como un theremin,
 como un payaso, 
como un petardo, 
como un doctor, 
como un asesino…
 Puedo ser tribal. 
Irónico. 
O desequilibrado. 
Ciertamente, mi voz es mi instrumento